Lección 47 parte 1

ESCUELA DE LIDERAZGO SAN PABLO

"Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo." (I Corintios 11:1)

(Con Frank Eiklor, Walter Contreras, Cecilia Contreras y Christopher Lucey)

ARMADURA DEL ESPÍRITU (Parte 1)

LECCIÓN 47 Parte 1

INTRODUCCIÓN

"Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra la asechanzas del diablo." (Efesios 6:11)

Este verso forma parte de una de las lecciones bíblicas más grandes en la guerra espiritual del Nuevo Testamento. Es verdad que nuestro Dios es un Dios impresionante. Es también verdad que tenemos a un enemigo muy despierto que busca las maneras de debilitar nuestra devoción a Dios y desea destruirnos. Eso significa que debemos ser santos y muy despiertos para poder reconocer quien es el enemigo, aprenda a cómo ponerse la armadura del Espíritu, y pelee para ganar.

RECONOCIENDO LAS ESTRATEGIAS DE SATÁNAS

Fue visto primero en el Jardín de Edén, y estará aquí hasta el fin de los tiempos. ¡Tentación! ¿Todos nosotros la enfrentamos? El diccionario dice: "tratar de persuadir; inducir o seducir- despertar deseos; sea atractivo/ a; atraer." Nosotros nos asociamos generalmente a la palabra en el mundo moral; sin embargo, la tentación puede ser un factor negativo en partes normalmente buenas y necesarias de la vida. Necesitamos dinero- pero se puede tentar a querer más de lo que necesitamos y lo obtenemos por los medios injustos o sacrificando relaciones con el propósito de tener un momento de placer. . Lo mismo es con la comida, la televisión, aún el sexo en el matrimonio. Cuándo nosotros permitimos que Jesús sea Señor de nuestra vida- eso deletrea "Maestro, Jefe, Rey"-Él trae la liberación de lo malo y el equilibrio hacia lo bueno. Pero camine apenas un día en su propia carne y usted se encontrará un blanco fácil para un adversario muy despierto.

LA PROMESA INCREIBLE DE DIOS

Satanás es el tentador. Como lo hizo con Eva, él puede sugerir pero él no puede forzar. Es por eso qué la tentación, cuando resistida bíblicamente en el poder de Dios, no lo debilitará pero lo hará más fuerte en su dependencia del Señor. Mire esta promesa increíble: "No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar." (1 Corintios 10:13)

TRES COSAS PARA RECORDAR

1) Usted no está solo en su confrontación con la tentación; los santos más grandes

han sido tentados también

2) Dios es fiel y nunca permitirá que usted enfrente nada que Él y usted no puedan

soportar.

3) Él siempre proveerá una salida-los medios de salida o escape o un lugar de

aterrizaje. Él también le enseñará a cómo evitar la tentación al mantenerlo libre de

la gente, lugares y placeres que lo ponen a usted al alcance de las flechas de

satanás. Como el hombre que siguió rindiendo su debilidad en el alcohol pero se

quejó a Dios que él tuvo que caminar por el bar en su camino de la casa al

trabajo. "Cambie su dirección. Váyase al alrededor de la cuadra!", suspiro el

Espíritu Santo. Usted, también, puede descubrir que su propia "manera de

escape" es simplemente un cambio en dirección.

LOS HOMBRES MUERTOS NO PUEDEN PECAR

Mi propio método de confrontar la tentación es de estar de acuerdo con la Escritura: "fui crucificado con Jesús" (Gálatas 2:20), Yo también reconozco al viejo Frank como muerto (Romanos 6:11) y confieso con determinación e irrevocabilidad lo que Jesús dice acerca de mí: "Porque habéis muerto, y vuestra vida (la vida nueva de Cristo) está escondida con Cristo en Dios" (Colosenses 3:3).

Los hombres muertos no pueden ser tentados. Los hombres muertos no pueden pecar. Entre más usted y yo confiamos en el Espíritu Santo para que nos vacíe de todo lo que nos impide ser mejor y nos llene con Él Mismo, de esa forma experimentaremos el poder de Dios como la mejor "manera de escape" del poder de la tentación. Tenemos toda la armadura necesaria para derrotar los ataques de Satanás y las tentaciones, como aprenderemos en la segunda Parte 2.

(CONTINUARÁ)