Lección 81-3
ESCUELA DE LIDERAZGO SAN PABLO
"Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo." 1 Cor. 11:1
(Con
Frank Eiklor, Eileen Young, Walter and Cecilia Contreras)
DONDE EL
JUCIO COMIENZA (PARTE 3)
("En La Casa
De Dios")
LECCIÓN 81 Parte 3
INTRODUCCIÓN
Millones de Cristianos están
orando por una cosecha del tiempo final de personas experimentando a Jesucristo
como Salvador. Sin embargo, no muchos comprenden el precio que debe pagarse
para tener esa cosecha. Debe haber obreros que están limpios, consagrados y desafiados
por el Espíritu Santo para anunciar al mundo lo que significa pertenecer a
Jesús.
Veo grandes cambios que vienen
a las iglesias y denominaciones de hoy.
Jóvenes están dispuestos a imitar a quienes siguen de cerca a Cristo. Pastores
y líderes están examinando sus prioridades e intercambiando tradiciones meramente
humanas por humildes, verdades bíblicas. Sentencia ha comenzado en la casa de
Dios. El proceso puede ser doloroso pero la santidad y poder que vendrá de esto
encenderá el fuego a un ejército de seguidores de Jesús por todo el mundo.
Seguimos exponiendo los
lugares donde el Espíritu de Dios está moviendo las cosas en las iglesias.
Repase las dos últimas lecciones para los dos primeros cambio que vienen: 1) el
corazón de Dios por Israel y 2) Su llamado a una iglesia llena de testigos
valientes. Aquí está el número tres.
NÚMERO 3 - DE LA "PALABRA
PROFÉTICA" PELIGRO
La profecía es uno de los
grandes dones del Espíritu Santo. Varias denominaciones la interpretan de forma
diferente. Uno de los lados lo ven como "profetizar"- la predicación ungida
de la palabra de Dios. Mis hermanos carismáticos lo ven como "predecir",
decir lo que creen que es una palabra especial de parte del Señor a sus
oyentes.
Veo ambas partes como
"proféticas" y necesarias para el crecimiento del cuerpo. El gran peligro
reside en el "predecir" de "Así dice el Señor" cuando el
Señor no ha hablado. Peligro también está en el Cristiano que depende más de su
profeta favorito que en conocer la palabra de Dios y cómo escuchar la voz del
Espíritu Santo a través de una mayor intimidad con Dios.
El diablo ha también atrapado
a muchos como un "profeta" que se ha enamorado de su popularidad y
comenzó a hacer sus propios (o del diablo) pensamientos para "así dice el
Señor". Luego hace excusas diciendo que ningún profeta esta siempre
correcto y pegar o faltar es parte de la práctica necesaria para desarrollar el
don.
Es donde se pone espantoso. La
pobre alma que recibe tal error profético puede hacer que se arruine su vida.
Dios no permitió que sus verdaderos profetas jugaran con "así dice el
Señor". Equivocarse era pagar con su vida. Algunos de mis hermanos
carismáticos están encontrando más sensato decir "tengo una fuerte impresión
de que puede ser del Señor - quisiera que lo investigara", en lugar de
entristecer al Espíritu Santo con muchas afirmaciones "así dice el
Señor".
Una otra cosa. Un verdadero
profeta de Dios siempre estará abierto a pruebas y correcciónes. Él sabe que la
Cabeza de la Iglesia, Jesucristo, le dice a sus seguidores de no despreciar las
profecías, pero "no menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened
lo bueno". (1 Tesalonicenses 5:20, 21) Y él sabe que ninguna profecía o
"palabra de Dios" nunca será contraria a lo que Dios ya ha dicho
claramente en las Escrituras. Él también está abierto a tener sus profecías
juzgadas por otros hombres y mujeres espirituales para ver si están claras en
la palabra de Dios y tienen el testimonio del Espíritu de Dios. (1 Corintios
14:29).
El hecho de que muchos líderes
y pastores Cristianos ahora ven la "palabra profética" el
peligro es una buena cosa. Esto los
cierra a ser descuidados, orgullosos o incluso a falsas y diabólicas
"profecías" mientras los mantiene abiertos a declaraciones verdaderas
dadas por el Espíritu Santo para advertir, fortalecer o animar a Sus hijos.
(SIGUIENTE
LECCION: La Mayor "Evidencia" De Ser Llenos Del Espíritu Santo)